Diario vivir...

Cada día que pasa entiendo que soy nada y soy todo al mismo tiempo, nada porque mi Dios es todo para mis, acabo de ser padre y siento en mi corazón un alegría única que entiendo que mi yo es nada, pero también soy todo para Dios, él  me ve, me guía, me corrige, me enseña. En el transcurso del día descubro mis errores y acepto mis debilidades, y cada vez digo: ¡Dios, sigue haciendo la obra en mi! No me descuides... ¡Ayúdame! Puedo captar por la fe las innumerables veces que Satanás intenta destruirnos, y percibo su intención de destruir al pueblo de Dios. ¡Que miseria! desde el amanecer hasta el anochecer ese dragón intenta hacernos caer... Dios   mio, sólo tu poder me fortalece... Sostenlos con tu brazo poderoso...  no nos dejes caer en tentación... más libramos del mal, Amén.